Los amplificadores son un artículo esencial al tocar tus instrumentos eléctricos o electroacústicos, ya que logran el volumen ideal para conciertos en vivo, ensayos o estudios de grabación. Contar con el modelo que más te acomode es importante si quieres lograr un sonido que se adapte a tu estilo y el tipo de música que quieras interpretar.
Estos son los principales criterios que debes tener en cuenta antes de adquirir uno de estos productos.
En caso de que busques uno para ensayos en casa, salas de estudio pequeñas o conciertos en salones con pocas personas, puedes elegir un modelo de 5 a 15 watts. Estos amplificadores tienen la potencia ideal para funcionar a máxima capacidad en espacios donde no es necesario alcanzar un volumen demasiado alto.
Si buscas una mayor potencia, puedes optar por modelos de 15 a 50 watts, ideales para conciertos medianos y ensayos con varios músicos al mismo tiempo. Mientras que si necesitas un amplificador del mayor poder posible, lo recomendable es optar por modelos de 100 watts o más.
En caso de que prefieras tocar estilos que requieren menor distorsión, como jazz, blues o música clásica, te recomendamos optar por un modelo sin un canal de overdrive tan potente. Para géneros más pesados, como el metal o punk, lo ideal será elegir un modelo con más ganancia y capacidad de ecualización, como los amplificadores Marshall.
Una discusión popular en el mundo del bajo eléctrico y la guitarra eléctrica es cuál de estas dos tecnologías es mejor para el sonido de tu amplificador. Estas son las características de cada una:
Los tubos dan un tono distinto a la línea de sonido del amplificador de bajo o guitarra, ya que colorean el sonido original y lo hacen más cálido y natural. Esto puede ser útil si buscas un sonido único y eres fan de las distorsiones tipo overdrive o fuzz, ideales para blues y rock.
Por su parte, los transistores no colorean la señal, es decir, logran un sonido más limpio y plano que el de los tubos. Son ideales si quieres darle más protagonismo al tono de tu guitarra o tus pedales, o si quieres conectar el amplificador directo a un parlante monitor de tu estudio.
Estos son algunos de los consejos más importantes si estás recién comenzando a tocar:
¡Ya sabes todo lo que necesitas para elegir y usar tu amplificador favorito! Ahora solo queda disfrutarlo tocando en casa o en conciertos.